George Orwell fue uno de los escritores más influyentes de la literatura del siglo XX.
Nació en 1903 en Motihari, India. Hijo de Richard Walmesley, funcionario del comercio británico, y de Ida Limouzin, perteneciente a una familia de comerciantes franceses.
En 1917 obtuvo una beca para entrar en el prestigioso colegio privado de Eton y en 1922, en vez de aceptar una beca para ingresar a la universidad, decidió continuar con una tradición familiar y hacerse funcionario colonial.
Un dato curioso: durante un tiempo vivió con los vagabundos del este de Londres, trabajó lavando platos en París y de jornalero en los campos de Kent.
En su primer libro “Sin blanca en París y Londres”, narra los momentos difíciles que pasó a causa de la pobreza y el hambre.
Años más tarde, fue uno de los voluntarios que luchó en el Ejército republicano durante la Guerra Civil española, luego tras una serie de acciones, abandonó el país para evitar ser fusilado, fruto de esa experiencia escribió “Homenaje a Cataluña”, considerado como uno de los relatos más conmovedores escritos sobre esta guerra.
Leer a Orwell es conocer su posición y rechazo ante los totalitarismos, lo cual deja claro con dos de sus obras más conocidas; “Rebelión en la granja”, basada en la traición de Stalin a la Revolución Rusa, y “1984”, libro que ofrece una descripción de la vida bajo la vigilancia constante del “Gran hermano”.
Orwell a pesar de morir a una edad temprana, dejó un legado literario donde sentó su posición y visión del mundo. Falleció a los 46 años en Londres a causa de la tuberculosis.